lunes, 10 de mayo de 2010

COMERCIO - julio cortázar

Comercio

    Los famas habían puesto una fábrica de mangueras, y emplearon a numerosos cronopios para el enrollado y depósito. Apenas los cronopios estuvieron en el lugar del hecho, una grandísima alegría. Había mangueras verdes, rojas, azules, amarillas y violetas. Eran transparentes y al ensayarlas se veía correr el agua con todas sus burbujas y a veces un sorprendido insecto. Los cronopios empezaron a lanzar grandes gritos, y querían bailar tregua y bailar catala en vez de trabajar. Los famas se enfurecieron y aplicaron en seguida los artículos 21, 22 y 23 del reglamento interno. A fin de evitar la repetición de tales hechos.    Como los famas son muy descuidados, los cronopios esperaron circunstancias favorables y cargaron muchísimas mangueras en un camión. Cuando encontraban una niña, cortaban un pedazo de manguera azul y se la obsequiaban para que pudiese saltar a la manguera. Así en todas las esquinas se vieron nacer bellísimas burbujas azules transparentes, con una niña adentro que parecía una ardilla en su jaula. Los padres de la niña aspiraban a quitarle la manguera para regar el jardín, pero se supo que los astutos cronopios las habían pinchado de modo que el agua se hacía pedazos en ellas y no servía para nada. Al final los padres se cansaban y la niña iba a la esquina y saltaba y saltaba.    Con las mangueras amarillas los cronopios adornaron diversos monumentos, y con las mangueras verdes tendieron trampas al modo africano en pleno rosedal, para ver cómo las esperanzas caían una a una. Alrededor de las esperanzas caídas los cronopios bailaban tregua y bailaban catala, y las esperanzas les reprochaban su acción diciendo así:    ¡Crueles cronopios cruentos!. ¡Crueles!    Los cronopios, que no deseaban ningún mal a las esperanzas, las ayudaban a levantarse y les regalaban pedazos de manguera roja. Así las esperanzas pudieron ir a sus casas y cumplir el más intenso de sus anhelos: regar los jardines verdes con mangueras rojas.    Los famas cerraron la fábrica y dieron un banquete lleno de discursos fúnebres y camareros que servían el pescado en medio de grandes suspiros. Y no invitaron a ningún cronopio, y solamente a las esperanzas que no habían caído en las trampas del rosedal, porque las otras se habían quedado con pedazos de manguera y los famas estaban enojados con esas esperanzas.

viernes, 7 de mayo de 2010





¿Quien se parará sobre la mesa para despedirte?

¿quien más que tu comprenderá la angustia?



los dialogos dadá, el cápitulo 68 de cortázar,

las obras de teatro, la cuesta creerlo,

las explicaciones de los poemas de nicanor


gg

parece que la kg

las predicas a zalo reyes


la clase del olimpo griego en un dia y las tremendas tetis de la diosa


los cuentos para recordar, las historias que cosiste al universo


las cátedras de pool, las clases de pintura, el malabarismo


Quién devolverá el tiempo?

quién nos explicara las imagenes

de la pelicula the wall

o nos abrira los ojos a las alturas de machu picchu?



quién

comprenderá tanto la angustia,

como para alejarse lo mas posible de ella


ahora que no estás

se te extraña, 

pero vives hoy
en todas las lecciones de vida que nos dejaste



¿Quien se parará sobre la mesa para despedirte?


(al Profe, Luis Bustos, a un año)

lunes, 3 de mayo de 2010

refugio otoñal

"you give your hand to me" Ray Charles

como no vas a saber
que los relojes
abren sus pupilas y vomitan infinitos
cuando cae la locura de tus sienes
poco a poco se abren
los mismos azuloides
las mismas  malditas palabras
oscureciendome la cara

levanto mi mano
y sin palpar nada
imagino que vienes
a tejer entre mis dedos
las palabras perdidas
en el patio de tus comisuras

vendrán nueve vidas más
doscientos cuerpos  prometiendote infinitos
ninguno sabrá
-ninguno-

lo que escribo sobre tus ojos,
no lo digo
como el llanto de un niño que no se atreve
mas bien,
con la palabra de un hombre
que muere lentamente
a cada palabra

finalmente,
cansado,
me arrastro por el texto
y
termino aquí
escribiendo mi parte favorita

donde como en una película en blanco y negro
acaricio tu pelo
lentamente me acerco a tu boca,
y por millonésima,
te doy el beso imáginario de rigor.

-y tu mano busca la mia-